Judiciales
Condenan a la pena de 14 años al asesino de Néstor Rivelli
Es por el delito de Homicidio Simple. El hecho ocurrió el 28 de Marzo del 2018, en inmediaciones del CAPS 6, cuando de manera sorpresiva y certera, Walter Monzón acuchilló a la víctima Néstor Rivelli. Anteriores enfrentamientos entre los involucrados habrían desembocado en el sangriento hecho.
Viernes, 15 de marzo de 2019
El Tribunal Oral y Penal de Paso de los libres, integrado por los doctores Marcelo Pardo, Gustavo Ifran y Marcelo Fleitas, encontró penalmente responsable a Walter Ramón Monzón (22) de haber causado la muerte de Néstor Ariel Rivelli (27) y lo condenó a la pena de 14 años de prisión por el delito de Homicidio Simple.
El 28 de Marzo del 2018, siendo las 11:50, en inmediaciones del CAPS 6, por calle Irigoyen, circulaba en su moto Corven Hunter 15 cc, Néstor Ariel Rivelli, al detener su marcha, frente al mencionado Centro de Salud, el ahora condenado Walter Ramón Monzón, de manera sorpresiva, sin mediar palabra, se aproximó a la víctima, lanzando un golpe con un cuchillo con una trayectoria de arriba hacia debajo de derecha a izquierda, el cual impactó en el ventrículo derecho del corazón.
Luego Monzón junto a otros sujetos no individualizados hasta la fecha se dio a la fuga, a la vez que Rivelli es socorrido por Diego German Sena y Gustavo Javier Martínez quienes lo trasladaron hasta el CAPS de referencia, para luego ser llevado hasta el Hospital San José, donde a causa de las heridas recibidas muere minutos después.
En su testimonio Diego German Sena, dijo ser amigo de Rivelli, sostuvo que “ese día me dirigí a la casa de Gustavo Martinez, quien vive frente al CAPS 6, en mi bicicleta detrás de Rivelli, quien conducía una moto. Cuando llega Rivelli a lo de Martinez, observo que Walter Monzón, sin darle tiempo a nada le dio una puñalada con un destornillador a mi compañero, por lo que de inmediato trato de socorrerlo, lo cargo en mis brazos y se me desvaneció en el medio de la calle por lo que lo arrastro hasta la vereda del CAPS donde enfermeras del lugar me dijeron que no lo moviera, o que lo deje ahí, donde ellas lo atendieron, luego se lo llevaron en ambulancia hasta el Hospital”.
Sena, dijo desconocer el motivo por el cual Monzón agredió a su compañero, pero señaló que vio “desde horas tempranas que Monzón molestaba a los que pasaban, por lo que él es problemático, estuvo preso e inclusive allí casi mató a uno” remató.
Para finalizar Sena expresó que “Monzón colocó el destornillador en su cintura y se fue caminando de ahí con otro sujeto, que no supe reconocer”.
Cabe destacar que el informe forense advierte que la herida fue causada por un arma blanca, con filo de un lado y sin filo del otro, es decir con un cuchillo, descartándose que se tratara de un “destornillador”. Para los forenses la víctima no esbozó ninguna reacción defensiva, además de concluir que la trayectoria del arma en el cuerpo de Rivelli, se condice con la descripción del ataque narrado por Sena.
Otro de los testigos, Gustavo Javier Martínez, aseveró “ese día yo me encontraba en mi domicilio, cuando llega Monzón, a quien lo conozco de vista porque la hermana vive en la esquina de mi casa, en Irigoyen y Mendoza. Este me pide agua, yo entro a buscar el agua que me pidió, no habré tardado ni dos minutos y lo escucho a Sena que estaba a los gritos, como Sena siempre es muy jodon no le di importancia, pero cuando salgo de mi casa, no llego a darle el agua Monzón, Sena me pedía que lo ayude, yo le pregunto qué pasó y me responde AQUEL PELOTUDO QUE VA ALLÁ LE HINCÓ”, haciendo referencia a Monzón que para eso ya se iba con el otro chico para el campito.
Lo sustancial del testimonio de Martínez, es que si bien no presenció el ataque a la integridad física de Rivelli, si da cuenta que momentos antes vio a Walter Monzón junto a un masculino no identificado hasta la fecha.
Por su parte el ahora condenado Walter Ramon Monzón declaró “estaba sentado enfrente del CAPS, en la casa del señor Tambucho (Gustavo Martínez), de pronto me cruza este hombre (Rivelli) el cual no conozco, solo de vista lo conozco, los compañeros de él me hincaron hace aproximadamente 4 meses, Comienza a insultarme (siempre refiriéndose a Rivelli) me dice cosas por todos, hasta por mi mamá, yo le quedé mirando, me reí. Hasta que en un momento este hombre, se baja de la moto, se me abalanza con un cuchillo en la mano derecha, me quiere hincar, lo abrazo, luchamos y caigo sobre él, y observo que se hinca el cuchillo. Cuando se clava el cuchillo, él se para y yo quedé esperando a ver qué pasaba, intenté ayudarlo, pero se venía gente con palos y machetes que eran familiares de él. Entonces me largué a llorar y me fui para el monte sin saber lo que pasó, mientras que el cuchillo quedó en el lugar porque él se lo sacó y lo dejó ahí, era un cuchillo de cabo negro de unos 20 centímetros aproximadamente” concluyó.
Si bien en el juicio no se pudo establecer el móvil preciso del asesinato, esta redacción, obtuvo información que da cuenta de viejas rencillas entre los involucrados que desembocaron en el sangriento hecho.Viernes, 15 de marzo de 2019