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Judiciales
Tres testigos declararon y es inminente una inspección ocular en el lugar del hecho

En el juicio que se investiga el crimen del colectivero Ulises Bravo, ayer lunes declararon como testigos dos médicos y la enfermera que se encontraban de guardia. Se trata de los doctores Ignacio Cabral, Delfor Ghiglioni y la auxiliar Nora Barboza

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Martes, 14 de agosto de 2018

Ayer se llevó a cabo la cuarta jornada de debate oral y público que trata de establecer las responsabilidades de los imputados Joaquín Leal y Gastón Bonpland Ledesma.

El Tribunal Oral y Penal conformado por los Dres. Marcelo Fleitas, Marcelo Pardo y Gustavo Ifrán escucharon el testimonio de tres testigos que cubrían la guardia del Hospital San José, lugar donde fue asistido inmediatamente la victima Ulises Bravo el 10 de Junio del 2016 luego de recibir 11 puñaladas.

El primero en prestar testimonio fue el Dr. Ignacio Cabral, el medico manifestó “hablé con el paciente en el momento que entró, él no estaba lúcido” luego prosiguió diciendo “aparentemente le había dicho a la enfermera que se trató de un ataque por una mujer”.

Uno de los integrantes del Tribunal le preguntó si conocía el apellido Centurión, Cabral respondió que sí y agregó “sería la mujer en cuestión, pero no recuerdo con precisión”.

El Dr. Pardo le preguntó que significaba el término heridas quirúrgicas y suturadas que figuran en el expediente. El facultativo contestó “son parte de una acción médica, provocadas a veces por la fuerza en forma involuntaria cuando se asiste quirúrgicamente a un paciente de manera urgente”.

El Dr. Gustavo Ifran le mostró al testigo el cuchillo (tipo naranjero) que usó Joaquín Leal para el brutal ataque, y le formuló la siguiente pregunta “si con esa arma pudo haber provocado la muerte de Bravo”. Cabral fue categórico al responder que “no”. Con esta respuesta refuerza la hipótesis que se usaron dos armas blancas para matar a Bravo.

Luego fue el turno de declarar el Dr. Delfor Ghiglioni, también de guardia el día del hecho. Ghiglioni relató “cuando llegué el paciente estaba bastante descompensado, solo dijo que lo atacaron dos muchachos sin aclarar los motivos”.

Por las heridas que recibió Ulises Bravo señaló, “las lesiones pudieron haber sido por una o dos armas, no puedo asegurar”, siguió explicando “con un arma se puede provocar dos tipos de heridas, según el ángulo y la fuerza que se ejerza, pero no soy perito para determinar” concluyó a modo de opinión.

Esta visión se contrapone a la del Dr. Cabral, pero serán los Dres. Carlos Vizcaíno y Enrique Vargas que realizaron la autopsia, quienes tendrán la última palabra sobre este aspecto. Cabe destacar que estos dos últimos mencionados profesionales declararan como testigos en la próxima audiencia.

Para finalizar prestó testimonio la enfermera de guardia, Nora Barboza, dijo solo recordar que Bravo le expresó antes de descompensarse “eran dos personas las agresoras y que se trató de un ataque por celos, escuchó decir el apellido Centurión”.

Se espera con mucha expectativa y fecha a determinar la inspección ocular en el lugar del hecho cerca de la zona denominada La Balanza, en virtud de lo manifestado por uno de los imputados Joaquín Leal que aseguró saber dónde arrojó el cuchillo el otro acusado Gastón Bonpland Ledesma.


Foto: Dres. María Soledad Fresneda y Facundo Sotelo, defensores de Joaquín Leal y Gastón Bonpland Ledesma respectivamente


Martes, 14 de agosto de 2018

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