Boca, con un enorme Romero, clasificó por penales a la final de la Copa Libertadores tras empatar con Palmeiras
Tras el 0-0 en la Bombonera, el equipo de Almirón igualó 1-1 y ganó desde los doce pasos por 4-2 para acceder a la definición continental ante Fluminense. El arquero Xeneize fue la gran figura, en un choque donde fue expulsado Marcos Rojo.