En una entrevista con época, Gustavo Valdés expuso cuáles serán los principales ejes de su gestión. Analizó problemas y soluciones en educación y seguridad. Apuntó la necesidad de previsibilidad en política salarial y destacó los objetivos alcanzados en el trabajo mancomunado con Nación. Resaltó los logros de Ricardo Colombi y castigó muy duro a la Administración de Cristina Kirchner.

              

Domingo, 10 de diciembre de 2017

“Hace unos días caminábamos por Goya y paramos en una plaza a comer hamburguesas”. La narración es simple, mundana, terrenal. La frase coloquial no denota que el emisor es el Gobernador de Corrientes, Gustavo Valdés, quien al momento de la publicación de la presente nota encara sus primeros minutos en el Sillón de Ferré.
“¿Podemos hacer la nota sin saco?”, pregunta el ahora Gobernador para burlar el estricto protocolo indumentario. Instantes después, lo cuelga en una de las sillas de la sala en la que se concreta la entrevista.

“Perdón ¿dijo que paró en una plaza a comer hamburguesa?”, preguntó uno de los periodistas de época. “Sí, ¿qué tiene de raro? En Capital, suelo comer en Beto´s frente a la comisaría Séptima”, responde el Mandatario correntino. “Un gobernante es como cualquiera. Me gusta pescar, los corsos, voy al Festival del Chamamé, siempre camino por la Costanera. Un Gobernador no debe alejarse de la gente, encerrarse. Si lo hace, es el mejor candidato para perder el poder”, fue su tajante afirmación.

Durante más de una hora, Valdés narró cómo pretende llevar adelante su gestión de Gobierno. Aseguró que la caja de los jubilados provinciales permanecerá en manos de los correntinos, que continuará con una política salarial previsible, que tiene esperanza de que la reforma del Código Procesal Penal mejore el sistema de justicia, destacó el trabajo mancomunado con la Nación y no ahorró críticas a la gestión de Cristina Kirchner, presidente a la que calificó de egoísta y autoritaria.

La entrevista con época se concretó el feriado viernes 8 de diciembre al mediodía. Minutos antes del encuentro, Valdés dio a conocer su gabinete en conferencia de prensa. La mayoría de los funcionarios actuales continuarán en sus labores.

Anunció su gabinete. No hubo muchos cambios en relación a los principales funcionarios de la gestión de Ricardo Colombi…
Podríamos ser criticados por este gabinete porque no hay cambios bruscos. Buenos Aires (por la Administración de Mauricio Macri) está a una velocidad y nosotros iniciamos el Gobierno. Si cambiamos el gabinete completo, ponemos todos pibes nuevos, hay que imaginar lo que le costará a la Provincia. Por eso los cambios tienen que ser previsibles, acertados. Necesitamos contar con gente con experiencia, que conozcan la velocidad y los temas que se estén trabajando en Buenos Aires para no perder oportunidades.

¿Cuánto impacta el desfasaje en los mandatos del Gobierno nacional con el correntino?
Ellos hace dos años gobiernan y yo recién empiezo. Pesa. Por eso la necesidad de funcionarios con experiencia. Vara (Jorge, ministro de Producción), por ejemplo, no solo es excelente funcionario que conoce todos los temas de la provincia y cada área y rincón de Buenos Aires, además de saber dónde y cómo tramitar. Si nombráramos a una persona nueva, que también tenemos en el equipo, pero sin semejante experiencia, la producción podría perder oportunidades. Yo fui ministro con Vara, lo conozco, tengo confianza. No hay que cambiar solo para conformar a los que lo piden. Hay una nueva impronta de cómo gobernar que se las transmitiré a partir del 10 de diciembre. Son otras características, direccionadas a la modernización del Estado que, por allí a la gente no le repercute de manera directa, pero sí en la forma de comunicarse y conectarse con la Administración. Es fundamental. El objetivo también es lograr el desarrollo a partir de la estabilidad fiscal que hoy tenemos en nuestras finanzas. Ese es el desafío que debemos dar con un equipo de trabajo que está formado, preparado.

En los últimos dos años, Chaco (en manos de la oposición nacional) recibió más recursos que Corrientes para obras. Pero tanto Peppo (Domingo, gobernador de Chaco) como Capitanich (Jorge, intendente de Resistencia) aseguran que son planes iniciados en el Gobierno de Cristina Kirchner ¿Cuándo podremos salir de esa inercia y sacar provecho de esta alineación entre Nación y Provincia que genera tantas expectativas?
Tenemos que salir de la inercia perjudicial que nos dejó el Gobierno de Cristina Fernández de Kirchner y de la que también fue responsable “Coqui” Capitanich, su ministro coordinador. Lo que nos pasa a los correntinos es culpa de la discriminación de esa gestión por tener un gobierno de signo diferente. Ahora, estamos incorporando nuevos planes, levantando incluso algunos que fueron prometidos y luego negados por la propia expresidente, como la autovía de ingreso a la capital o la llegada del gas natural. El Gobierno kirchnerista nos hizo perder mucho tiempo negándonos la posibilidad de inversión. Si no hubiesen sido tan egoístas, tan autoritarios, estaríamos mucho mejor. Hoy, con el Gobierno nacional, hablamos de otra manera, encaramos reuniones fundamentales para el desarrollo de la provincia. Cuando estaban ellos, los mismos que aseguran que saben todo, íbamos y decíamos que éramos correntinos, la respuesta era siempre la misma: para ustedes no hay nada.
Uno de los puntos que más se destacó de la gestión de Ricardo Colombi fue la previsibilidad financiera que significó, por ejemplo, el pago de los salarios de los estatales sin sobresaltos. ¿Cuál será su política salarial?
Hay que ser previsible. Si no lo somos, tampoco lo será la economía. Sabemos lo que significan los salarios para el sector público y su impacto. Días atrás, yendo a Buenos Aires con Colombi, nos encontramos con docentes de Chaco. Ellos nos decían que los correntinos tuvieron suerte porque les aumentaron un 40% el salario, mientras que a ellos el incremento fue sólo del 7%. Pero, sin embargo, en ese espejo queremos mirar los correntinos. Es un espejo que no tiene vidrios. Nos miramos y decimos lo que queremos pero no es la realidad de Chaco. En Corrientes tenemos una política salarial previsible que hasta en los momentos difíciles permitió la mejora de los ingresos. Así debe continuar. Tal vez pueden faltar recursos para obras públicas pero para garantizar los salarios tenemos una política fiscal acorde a nuestras posibilidades. Y somos cuidadosos. No queremos que se rompa la cadena de pagos de salarios porque sabemos que la economía de la provincia se hace pedazos y volveríamos a un proceso que pretendemos que nunca más se repita.

¿Cómo aumentar las obras sin recursos?
Se hizo obra pública como nunca antes. Por ejemplo, la posibilidad de enripiar 1.700 kilómetros de caminos rurales era impensada. Hubiéramos hecho mucho más si no nos discriminaban. Hoy, con el Gobierno Nacional podemos acceder a créditos, a financiamientos, tenemos ayuda que nos permite dar celeridad a la obra pública. Estos dos años fueron muy buenos, pero los cuatro que vienen serán mucho mejores para Corrientes. Por primera vez tenemos un Gobierno Nacional que cree en nosotros.

Una vez más se repitió un hecho observado desde hace varios años: largas colas para inscribir en los centros educativos. Pasa en todos los niveles, desde los jardines de infantes hasta los institutos terciarios ¿Qué ocurre? ¿Faltan escuelas, docentes?
Hay varios factores. Esta es una de las preocupaciones que ya le manifesté a la ministra de Educación (Susana Benítez, quien continuará en el cargo). Hay que modernizar y mucho al Estado. Debemos tener inscripciones a través de la informática, por supuesto respetando los controles y las normas. Hay establecimientos públicos que son muy buenos y son muchos los alumnos que quieren ingresar a ellos. En una ciudad con 400 mil habitantes, es lógico que se produzca esta situación. En Corrientes no ocurre como en otros lugares en los que es obligatorio inscribirse exclusivamente en la escuela de la zona de la ciudad en la que reside. Hoy, los estudiantes tienen acceso a cualquier colegio de la ciudad. Si hubiera el mismo nivel educativo en todas las escuelas, no existiría ese inconveniente. Sería otra forma de solucionar este problema, pero es utópico.

Código Procesal Penal
Por estos días, la Legislatura correntina debate un proyecto de reforma del Código Procesal Penal. Usted es un hombre de leyes ¿Qué lectura da a esta iniciativa?
Hay que saltar del sistema mixto actual al acusatorio. Son dos conceptos distintos. El primero es escrito, engorroso para nuestros tiempos y que provoca una justicia muy lenta. Hoy, la sociedad se entera en horas de un robo o un homicidio. Sin embargo, para ver la sentencia tendrá que esperar cuatro, cinco, ocho años. Hay que agilizar el sistema sin perder las garantías constitucionales. La única manera es cambiar la norma. Es un paso indefectible a la modernización que debe dar la Justicia. Y lo tenemos que hacer entre todos, con los poderes judicial y legislativo y con cada uno de los actores del código.
¿Tiene fe en que el proyecto finalmente será aprobado? ¿Por qué se avalaría éste cuando otros fueron desechados?
El que se debate implica el desembolso de recursos para llevar adelante el sistema. Hablamos con el ministro (de Justicia de la Nación, Germán) Garavano por fondos para que pueda implementarse el cambio de sistema. Por supuesto, habrá aportes propios de la provincia para obtener un mejor sistema de justicia, más moderno, de tutela efectiva.

Jueces, abogados, legisladores y funcionarios entienden de qué se trata un nuevo Código Procesal Penal. Pero ¿Cómo explica al vecino? ¿Cómo impactará en ellos la reforma? ¿Qué significado tendrá en delitos que observan todos los días como, por ejemplo, el de los motochorros?
En el caso de que se detenga a un delincuente y sea puesto a disposición de la Justicia, se hace un juicio más abreviado y puede culminar en sentencia en dos meses. De esa manera, el ciudadano siente que tiene una tutela jurídica efectiva. En los otros, en el de los códigos mixtos, uno tiene que pasar primeo por 30 días en la Policía, después por un proceso de instrucción, luego debe ser llevado a juicio si es un delito grave, sino un juez dicta sentencia si es menos de tres años y, a veces, ese proceso dura igual o más tiempo, o caduca, o desaparece, o nunca más se entera qué pasó. Con este nuevo sistema, el proceso se vuelve mucho más ágil y hace que los delitos considerados menores en el ordenamiento jurídico terminen con una sanción, que hoy no lo tienen en razón de que los juzgados sopesan cuáles son los juicios más graves ¿Qué sentirá el vecino? Hoy declara en el sumario que está en manos de la Policía, después lo volverán a llamar desde el juzgado y deberá ratificar lo dicho ante la Policía porque aquellas palabras no valen y sólo tienen valor lo dicho en el juzgado. Entonces ¿Para qué me dijiste que diga todo en la Policía? Debemos tener una política de estado clara para adelante, o sino las instituciones no avanzan. Debemos lograr que los ciudadanos sientan que hay una Justicia que los ampara.

¿Por qué cuestan tantos los cambios?
Son cambios de fondo. Siempre cuestan más que los de forma. Hay que modificar el Estado y deben intervenir los tres poderes, todos tienen que estar de acuerdo.

¿Le gustaría ser el Gobernador que produzca todos estos cambios?
Me gustaría que los correntinos produzcan todos estos cambios. Ricardo Colombi los ha dado inicio. Quiero ser el Gobernador que los culmine. Es una obligación del Estado lograr que los ciudadanos se sientan protegidos por una Justicia proba, eficiente y veloz. La justicia lenta no es justica, es una verdad de Perogrullo.

Usted fue Ministro de Gobierno (2009-2013) y tenía a la Policía bajo su órbita ¿Qué política aplicará para combatir el actuar delictivo?
Hay una inversión policial enorme y lo hacemos desde hace rato. Este año será el de la primera promoción de los oficiales egresados con el título de licenciados en Seguridad Pública y Ciudadana. Este programa comenzó cuando era Ministro y continuó estos años como una política de Estado que tenía como objetivo lograr el cambio. Pretendemos que quien esté al frente de la Jefatura sea un profesional que pueda diseñar una política de seguridad y que no esté solamente en manos de la política.

¿Tiene pensado una reunión con los intendentes?
Sí, aunque todavía no hay fecha. Cuando asumió Colombi en su primer gobierno, los municipios recibían el 12% de los recursos (de coparticipación). Hoy tienen un 60% más, pasamos de 12 puntos a 19. Tener esta mejora de recursos automáticos todos los meses es importante, consolida su posibilidades económica. Aparte, reciben el 100% del impuesto inmobiliario urbano y del automotor. Desde lo político, se les otorgó la facultad a cada municipio de dictar su Carta Orgánica. Corrientes es la provincia más federal de Argentina.

¿Charla habitualmente con Tassano (Eduardo, Intendente de Capital)?
Charlamos… y mucho. Y lo seguiremos haciendo. Y vamos a trabajar enormemente.

Tras la intervención federal de 1999-2001, siempre Provincia y Capital vivieron momentos de inestabilidad en sus relaciones. Mucho se habló en la campaña de la necesidad de una alineación entre ambas. Pero, ¿Cómo lograr normales relaciones institucionales sin importar nombres?
Tienen que ser normales. Ayer (por el jueves) caminábamos con un funcionario nacional (Ivan Kerr, ‎subsecretario de Desarrollo Urbano) por Santa Catalina. Estábamos representantes de los tres estamentos viendo como resolvíamos para entregar las viviendas lo antes posible, un plan que nos costó mucho rescatar, en el que se han concretado enormes inversiones. Se volcaron cerca de 1.200 millones de pesos de los cuales el 80% se produjo en esta etapa del gobierno nacional. Este es un ejemplo de cómo hay que trabajar con la Nación.
El presidente Mauricio Macri hizo hincapié en numerosas oportunidades en la necesidad de desarrollar la industria forestal en Corrientes. Dijo que será el motor de desarrollo de la provincia…
Tenemos peleas que son centrales para el futuro de los correntinos. Tiene que ver con la energía y el desarrollo. Es cierto, la industrialización de la madera es nuestro gran motor. Hoy la energía renovable es fundamental para nosotros que vamos a producir casi 100 megas con el chip de la madera. Tenemos 550 mil hectáreas forestadas (Nota de la Redacción: Corrientes es la provincia con mayor superficie de bosques cultivados del país) y un gran potencial para industrializar nuestra madera. Es el desafío. Si hay industrialización, hay trabajo, hay recursos.

Las giras maratónicas encabezadas por Ricardo Colombi fueron una marca registrada en sus gestiones ¿Las continuará?
Es una forma de hacer política de ECO. Continuarán. Hay que caminar. A la gente en el interior le gusta ver a su Gobernador. Porque sino todo termina en Capital. Conozco todas las ciudades y pueblos de Corrientes. Y el 70% de los parajes. El otro día me toco conocer Paraje Tala y vi la esperanza de sus pobladores. Allí asumimos el compromiso de desarrollo, de mejora. El Gobernador debe estar atento a su gente, desde el primero al último.

Domingo, 10 de diciembre de 2017

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