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Elecciones 2021
La Rosca

Cómo se gestaron las listas de candidatos en ECO y Todos por Libres. Faraldo y el “negoción” político. El desbande de su tropa y la salida elegante. La pulseada de Gustavo Valdés y Ricardo Colombi, como telón de fondo. Los fracasos de ELI y el PRO. Los tironeos por lugares en las listas. La variante Miguel Arias en la formula, junto a Martín Ascúa. Karina Roldan, la candidata tapada. Los heridos de Todos por Libres.

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Viernes, 1 de octubre de 2021

Terminó el misterio sobre las alianzas y nombres de candidatos que competirán, el venidero 14 de noviembre, en el orden local.

Encuentro por Corrientes (ECO) y Todos por Libres, son las dos grandes alianzas que polarizarán el electorado.

En soledad pero manteniendo la palabra empeñada de no acordar con ningún espacio político, el partido Ciudadanos a Gobernar, llevará la fórmula a intendente y vice, Eduardo Ávila- Raúl Verón, mientras que la lista a concejales, la encabezará, Raquel Olivera.

El oficialismo municipal, no escapó al sismo, que significó en todos los tiempos, un cierre de lista.

Los tironeos previos producidos entre Agustín Faraldo (CAP) y ECO, tal vez explique, que la atención se posó más en la oposición, que en el frente gobernante.

Martín Ascúa (PJ), blindó los nombres, de los postulantes, hasta último momento y estuvo atento, al juego que se desplegaba en campo adversario.

Tuvo distintos planes en la cabeza, uno de ellos, es que su compañero de fórmula fuera el actual Diputado Provincial, Miguel Arias (PJ), pero más allá del factor sorpresa que implicaría la decisión, se concluyó dos cosas:
Primero, Arias no sumaría más de lo que ya suma, Martín Ascúa, en el universo peronista. Segunda cuestión, y gravitante, se temía, que algunos sectores de la sociedad, interpreten, que se intentaba sacar provecho político de la situación que lo tuvo como víctima a Arias, quien sufrió un atentado contra su vida, el pasado 26 de agosto en el cierre de campaña, del Frente de Todos, en la localidad de Tapebicua.

La idea, había entusiasmado a muchos, pero Ascúa finalmente la archivó, y se decidió por Marcelo Cuevas, actual vice-intendente.

Con Cuevas como compañero de fórmula, daba señales de continuidad de la gestión municipal, y apostaba a sumar sectores medios, basado en el perfil independiente del viceintendente, que supo tejer vínculos, en su labor, con instituciones intermedias.

En cuanto a la lista de concejales, de antemano se sabía que el primer lugar, Ascua lo reservaría, para una figura que no provendría de la política tradicional. Finalmente terminaron inclinándose, por alguien con militancia en el PJ, y con una imagen de renovación.

La elegida, fue Karina Roldan (PJ), funcionaria de la ANSES. Su nombre tuvo aceptación, hacia el interior del peronismo, algo no muy habitual de lograr. A lo que sumó, como activo, el trabajo social, que desempeña en clubes de servicio.

El segundo lugar en la lista, lo ocupa Juan Legarreta del Frente Renovador. Su inclusión fue más discutida, ya que su esposa Pamela Fernández intentó ir por su reelección, pero al final se optó por “Juancito”. En el acuerdo, prevaleció la condición del Frente Renovador, como socio fundante, del Frente de Todos, en el orden nacional. En tanto que en lo local, se consideró que Legarreta, es uno de los hombres de la primera hora, del proyecto político, que permitió el arribo de Martín Ascua a la intendencia municipal en el 2017 (ex alianza Libres Podemos Más).
La incorporación a la lista, generó ruido, principalmente en los partidos nucleados en la denominada “Multipartidaria”, que también reclamaban ser tenidos en cuenta.

En tercer término, “Juansy” Gauto Avancini de Nuevo Encuentro. El dirigente Kirchnerista, compitió en dos oportunidades, con lista propia, superando en el 2019, los mil (1000) votos, con boleta corta. Mientras que en el cuarto lugar de la lista se ubicó Alejandra Rojas (PJ).

Uno de los que no logró refichar, es el actual concejal, Diego Figueredo (PJ). Cuentan que tras haberle informado Ascúa a Figueredo, que no sería el candidato, la relación entre ambos no quedó del todo bien.

En el camino quedaron, Martín Joulia (PJ), Julián Castagnini (Multipartidaria). Por su parte, la Juventud Peronista, tenía una terna de candidatas, entre las que se mencionaba a Mariana Borda o Gisela Maidana. Tampoco pudieron obtener un lugar. A pesar de todo, ninguno sacará los pies del plato.

Sin espacios en la grilla de candidatos, pegaron el portazo, de “Todos por Libres”, Beatriz Moreira (Cambio Popular), Beto Baez (Partido Federal), y el partido Compromiso Correntino. Según algunas versiones insistentes, el Partido Comunista y Convocatoria Popular, también habrían emigrado.

El acuerdo logrado entre Agustín Faraldo (CAP 28), y ECO, estuvo plagado de idas y vueltas, durante toda la semana anterior.

Luego del cierre de alianzas, el pasado 14 de septiembre, todo hacía presuponer que Faraldo competiría con lista propia, y boleta corta.

Ya de entrada, ECO, le hizo sentir el rigor a Faraldo, impidiéndole usar boleta larga.

Al día siguiente del cierre de alianzas, Faraldo siguió su campaña y empezó a caminar la ciudad, acompañado del ex intendente, Raúl Tarabini.

En un momento se vio sorprendido, por un llamado a su celular. Era Eduardo “Peteco” Vischi (UCR), candidato a primer Senador Nacional de ECO+Vamos Corrientes, y líder del radicalismo local.

Vischi le pidió, encarecidamente, que deje abierta la posibilidad de seguir negociando. A partir de allí, el operativo ACUERDO, se puso en marcha.

Las llamadas del ex intendente Libreño, al empresario de la carne, fueron incesantes. Faraldo empezó a dudar.

Comenzó a tener reuniones con distintos operadores radicales. Siguió dudando, su voluntad, paulatinamente fue cediendo.

Ese fin de semana, tomó una decisión, viajaría a hablar con Ricardo Colombi (UCR), y luego tomaría una determinación.

El mandamás del radicalismo provincial, lo atendió, lo escuchó atentamente, y lo siguió apoyando en su propósito de competir por la intendencia, “seguí negociando, pero si no te dan la cabeza de la fórmula, andá solo”, le espetó.

Faraldo se sintió fortalecido, regresó a Paso de los Libres, pero durante el transcurso de la semana, comenzó el desbande de su grupo. Le cuestionaban, su actitud sectaria, de encerrarse en un pequeño círculo de amigos, para tomar decisiones, no escuchar al resto, y no comunicar absolutamente nada de lo resuelto. Otra cosa que le apuntaban, era su falta de disciplina, para afrontar la campaña.

Las deserciones producidas, le volvieron a generar dudas de proseguir con su proyecto. Ya para el viernes (día anterior al cierre de listas), la sangría era mayor, y la presión del radicalismo para negociar empezó a arrinconarlo.

La negociación la llevaba adelante, el propio Eduardo Vischi, mientras que internamente en ECO, pugnaban los distintos aliados para lograr una lista sin Faraldo.

Si la negociación política con Faraldo fracasaba, una de las posibilidades, era que Ana Miño (Vamos Corrientes), acompañe en la fórmula a “Yeyé” Schiro (UCR).

La otra alternativa era, que Ferreira Dame, sea el vice, pero el dirigente del Partido Popular, puso como condición, que su pareja, Silvina Alvez, ésta su vez, referente del Partido Liberal, forme parte de la lista de concejales, en un lugar salible. “Peteco” estalló con la propuesta, la rechazó de plano, eso le valió hasta una acalorada discusión, con el vice-gobernador electo Pedro Braillard Poccard, jefe político de Ferreira Dame.

Vischi por su parte, siguió adelante, con la intención de acercar a Faraldo. Sumó el respaldo, del Comité de la UCR local, para avanzar en una negociación, que implicaba retener la candidatura a intendente para el radicalismo, y de allí para abajo, ceder todo.

Quien seguía atentamente, lo que ocurría en el tablero de juego, era el Gobernador Gustavo Valdés.

El mandatario no quería cabos sueltos en esta oportunidad, ordenó expresamente, acordar sí o sí, de la manera que sea, en Paso de los Libres. En el fondo, Valdés sabía, que la pulseada era con su adversario (no declarado), Ricardo Colombi, a quien no estaba dispuesto, cederle espacios, y que todo se termine convirtiendo en una travesura política.

Por otra parte, el objetivo era claramente, evitar la fuga de votos, y obturar la salida dirigentes heridos del cierre de listas, de la alianza, hacia eventualmenteel espacio de Faraldo. En otros términos, no repetir la experiencia del 2017.

El sábado a la mañana, ya era fuerte la versión, en el local partidario de CAP, sobre un acuerdo con la UCR, para sumarse a ECO. Lo que le quedaba de tropa, empezó alzarse, el grupo de wat sapp, en el que estaban, militantes y simpatizantes, comenzó a vaciarse, pese a los infructuosos intentos de “Goia” Danuzzo, para contener a los desencantados.

Faraldo, que estaba en la capital Correntina, estaba al tanto de la situación existente, y tenía la decisión tomada. Trató de buscar una salida elegante, sin embargo exigía discutir los lugares de igual a igual, con sus nuevos socios. La negociación durante el sábado con Faraldo, fue muy dura. Exigía la vice-intendencia, cuestión que no era un inconveniente, pero agregaba a la mesa, dos concejales: el primero y el tercero.

La cuerda se tensó a tal extremo, que Ana Miño, quien ya tenía acordado ocupar el primer lugar de la lista de candidatos a concejales, amenazó con bajarse.

Finalmente, y tras fuertes tironeos, se acordó. ECO resignaba, dos lugares en la lista, pero la misma, debía ser encabezada por Ana Miño. El segundo y tercer lugar, lo ocuparían “Goia” Danuzzo y Raúl Tarabini, del sector de Faraldo. El cuarto lugar, después de varios cabildeos, fue para Jorge Ferreira Dame, que irá por su reelección. Se había logrado conformar, la fórmula “Yeyé” Schiro-Agustín Faraldo.

Eduardo Vischi, había alcanzado una vez más su objetivo. Faraldo había hecho un “negoción” político, pero a costas de perder credibilidad, frente a su propia gente. El hombre que venía a cambiar la manera de hacer política, quedaba absorbido por las estructuras. Habrá que ver, con el entendimiento alcanzado, cuantos votos podrá extrapolar Faraldo a ECO, pero eso es otra discusión.

Mientras tanto, “Yeyé” Schiro, salía indemne del forcejeo, producido por el armado de la lista. Lo habían preservado.

Por otro lado, los aliados políticos que demandaban espacios en la lista, quedaron con las manos vacías.

Los grandes perdedores fueron, el PRO, que por segunda elección consecutiva, no presentó candidatos a la ciudadanía. Y Encuentro Liberal (ELI), que no pudo renovar su banca en el Concejo Deliberante. El Presidente de Cámara de Diputados de la provincia, y líder del espacio político, Pedro “Perucho” Cassani, trinó contra Carlitos Gatti, presidente local del partido, por su desidia en la negociación. Ocurre que confundir el amiguismo con la política, trae como consecuencias, estos resultados.

Para las 21 hs del último sábado, los acuerdos en cada alianza, estaban cerrados, y todo asegurado, por las dudas, con una vuelta más de “rosca” a la tuerca.

Por Ignacio Villanueva



















Viernes, 1 de octubre de 2021

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