Ricardo Colombi se mostró satisfecho con la conformación de la alianza oficialista aunque fue muy crítico con muchos partidos de los que apuntó que “no tienen nada atrás”. Dijo que no considera “una traición” la decisión del Vicegobernador y del Intendente de Ituzaingó.

              

Domingo, 4 de julio de 2021

¿Está conforme con el cierre de alianzas?
Todo cierre tiene sus tironeos porque hay más de 31 fuerzas políticas. Pero es importante porque esta alianza es la que transmite a la sociedad la confianza y la seguridad de que evitará las recurrentes crisis institucionales del pasado. Si algo hemos consolidado en Corrientes es que fuerzas que en su momento eran muy antagónicas han encontrado un punto en común, que es la institucionalidad de la provincia. Nunca más una intervención federal. El marco de nuestra alianza representa eso: la confianza del ciudadano. Más allá de las diferencia que tengamos hacia adentro, el objetivo es siempre la provincia.

¿Cuál es el lado flaco, negativo, de esta conformación de alianzas?
La cantidad de partidos. Debemos discutir una forma diferente. Entre nuestra alianza y la de la oposición hay 55 fuerzas políticas. Y hay 22 más en estudio, que no salieron por cuestión de tiempo. No podemos tener en Corrientes 80 fuerzas electorales, 80 boletas en el cuarto oscuro. Es una discusión muy seria, un debate que debemos dar. Esto atenta contra el ejercicio de la democracia.

¿Hay partidos que sólo son sellos de goma?
No quiero utilizar esa frase… pero sí. Últimamente, el surgimiento de muchos partidos políticos no responde a una verdadera convicción política.

¿Hay oportunismo político? ¿Venden los sellos?
Exactamente. Hay partidos que surgieron por necesidad de sus dirigentes, porque no tenían espacios, porque creían que estaba agotada su pertenencia, había fundamentos. Hay muchos partidos que se abrieron, se dividieron. Lo que pasó en la década de los 90 entre el Partido Nuevo y el Autonomista. Uno puede analizar los motivos pero la realidad es que la crisis existió, muchos dirigentes se sentían que no estaban contenidos y se fueron. Pero hoy, de los 80 partidos políticos, te aseguro que, fácil, 30 no tienen nada atrás. Pero esas son las reglas de juego. Quizá habría que evaluar las condiciones de los reconocimientos de los partidos políticos.

El pase de Canteros a la oposición
¿Le preocupa la salida de la alianza del vicegobernador Gustavo Canteros?
No. No me preocupa. El eligió ese camino. Se resolvió que en Capital no habría más que un solo candidato a Intendente. No tuvo espacio. Lo mismo que ocurre con los partidos. Canteros dijo: no tengo espacio acá, creo que puedo ser útil en otro lado.

¿Está de acuerdo con la decisión de un sólo candidato de ECO en Capital?
Hubiese sido importante potenciar y ver los números y si era factible competir adentro. En ese sentido, en muchos lugares lo haremos. No creo que hubiese sido muy difícil en Capital y en otras localidades

Si de usted hubiese dependido… ¿habría habilitado que Canteros fuera candidato a Intendente?
Creo que hubiese tomado todos los recaudos necesarios para tratar de que esté. Es lo mismo que el caso de Eduardo Burna en Ituzaingó. Se le cerraron todas las puertas, le sacaron todos los partidos de la alianza y él quiere y tiene derecho a ser candidato. Si aquí no tuvo espacio, se fue a otro lugar.

¿Por qué dice que le quitaron todos los partidos? Usted es el presidente de la UCR…
Soy presidente de mi partido. Pero la alianza son varios sellos. Les retiraron los otros. Y nosotros respetamos las decisiones de los comités departamentales.

La pregunta es, entonces.. ¿Está de acuerdo con la decisión del comité departamental de Ituzaingó?

Si la mayoría dijo que este es el candidato, hay que respetarla.

Usted dijo que en algunos municipios habilitaron la competencia entre candidatos…
Hubiéramos tenido un criterio único. O todos, o ninguno. Allí es donde creo que no fuimos coherentes. En Bella Vista tenemos dos candidatos a intendentes en nuestra alianza. En Empedrado, también. ¿Por qué allí sí y en otros lugares no? O tenés uno o tenés varios. Me parece que deberíamos haber tenido un criterio uniforme.

¿Cómo siente que un intendente radical vaya con la boleta del peronismo?
El no va con un candidato peronista. Va con un partido que está en la alianza con el peronismo.

Es lo mismo…
No. Va a cortar boleta. En definitiva, la gente vota a la persona. En Ituzaingó a Burna lo van a votar porque es Burna o a Valdés lo van a votar porque es Valdés, no porque tenga el sello de un partido u otro. Por lo que hizo o no hizo. O a Juan Pablo Valdés por la expectativa que crea en la sociedad.

¿Estas conductas de Canteros y Burna usted no las considera como traición?
No. Bajo ningún punto de vista. Eduardo Burna es un hombre radical que ha trabajado, que ha ganado y perdido dentro del partido, que siempre llevó las banderas. Pero como no le dejaron competir, le sacaron los sellos, tomó una decisión. Puede ser cuestionado por uno u otro pero no hay nada de transfuguismo político. Igual que lo de Canteros. No tuvo opción acá, cree que tiene méritos para aspirar a ser algo políticamente y resolvió ir por allá.

Lo van a criticar… dirán que le dio aval a Canteros y a Burna…
Tantas cosas dicen… qué le hace una mancha más al tigre.

Si tuviera que votar en Ituzaingó… ¿a quien elegiría? ¿A Burna o a Valdés?
Yo no voto en Ituzaingó, voto en Mercedes. Pero creo que fue un error no dejarlo competir… a los dos.

***

“Si estuviera peleado con Valdés habría actuado de otra manera”
¿Cómo está su relación con (el gobernador) Gustavo Valdés?
Muy bien. Estamos hablando. Trabajamos en el marco de la alianza. El domingo (por hoy) lo tendremos en Mercedes, el lunes es el aniversario de la ciudad.

¿Cómo evalúa la actual gestión provincial?
Con su impronta, Valdés le dio el empuje necesario. Tuvo la virtud de profundizar el contacto con la gente, las recorridas y las presencias en las distintas comunas del interior. Eso es importante. En los dos años de (el expresidente Mauricio) Macri que permitió la devolución del 15% de la coparticipación, pudo consolidar aún más la cuestión fiscal financiera de la provincia.

Usted dijo “qué le hace una mancha más al tigre”, en relación a las tantas cosas que dicen de usted… Una de esas cosas que dicen es que está peleado con Valdés…
Tantas cosas se dijeron… Si estuviera peleado con Valdés habría hecho otra cosa, habría actuado de otra manera. Lo que pasa es que la usina de rumores siempre trata de llevar agua para su molino. Eso es lo que tenemos que evitar. Pongo como ejemplo al Pacto (Autonomista Liberal). Ese gobierno se convirtió en compartimientos estanco. Se debilitó. No debemos entrar en ese camino. Esa es responsabilidad de todos, no sólo de una persona.

***

¿El sillón de Ferré o de Colombi?
Pedro Juan Ferré quedó inmortalizado en la historia política del Taragüí. Entre 1824 y 1839 fue cuatro veces Gobernador de Corrientes. Pero, además, fue -hasta Ricardo Colombi- quien más tiempo estuvo al frente del Poder Ejecutivo provincial.
A tal punto el significado del histórico político al frente de Corrientes, que se popularizó la frase “el sillón de Ferré” como sinónimo de Gobernador. Sin embargo, en su tercer mandato, Ricardo Colombi superó a Ferré en el número de días como Mandatario provincial.

¿Dentro de unos años, le gustaría que no digan más el “sillón de Ferré” sino el “sillón de Colombi”?
No. Ferré fue un caudillo que es valorado por la historia. (Se toma unos segundos) Ayer fui a sacar fotocopia y le digo al chico “hace frío”. “Sí, hace frío”, me responde. Entonces le comento que “parece que no vino el veranillo de San Juan”. “Y eso que es”, me contesta. Perdimos muchas cosas… también en la historia. No me la creo. Un gobernador que transformó la provincia fue (Fernando) Piragine Niveyro. Y sólo estuvo cuatro años al frente de la Provincia. Hubo muchos gobernadores que, con aciertos y errores, hicieron muchas cosas. Estoy más contento por ser dirigente deportivo, por mi club… quiero que el deporte siempre sea una política de estado. ¡Que vuelva el fútbol! Lo que sí creo es que hemos marcado un camino: que el gobernante no se crea ni más ni menos que el ciudadano común.
De entrevistado a entrevistador
EPC040721-006F08Al comenzar la charla, Ricardo Colombi sólo puso una condición: que al terminar la nota periodística le dejaran a él hacer una pregunta a Carlos Simón, uno de sus entrevistadores. Y que la respuesta formara parte del reportaje. Se aceptó. Y se llegó al momento de la requisitoria.
“¿Por qué en todas las entrevistas que hacés a cualquier dirigente, un tercio de la nota está dedicada a mi persona?”, preguntó Colombi.
“Porque es un hombre que marca claramente la referencia política en Corrientes. No es uno más. Es el Gobernador que más tiempo estuvo al frente de la provincia. No hay animosidad. En absoluto. Esta es la nota más extensa de este ciclo. Esto marca el valor y la referencia de Ricardo Colombi”, fue la respuesta del periodista.

***

Larga charla y un par de chipá en el final
En la entrevista Ricardo Colombi no esquivó pregunta alguna, especialmente aquellas más picantes, de esas que siempre traen una frase ideal para titular. El exgobernador explicó todo y en varios tramos se impuso a cualquier repregunta para terminar la idea tal como la estaba pensando y exponiendo. Después contestó la nueva requisitoria.
En los primeros minutos midió sus palabras, pero siempre sereno: se movía como “pez en el agua”. Además, acentuó lo que quería subrayar, sobre todo cuando se le consultó sobre el armado de las alianzas, los que quedaron afuera de ECO y las listas de candidatos por el oficialismo. Animal político al 100%.
Las manos se movieron en cada enfatización de conceptos, pero la gesticulación apareció ya en primer plano cuando habló de estrategia. Era como aquellos arquitectos que tienen en frente suyo esos planos de obras y sobre los cuales explica cada parte de la estructura. En este caso, el plano imaginario era el proyecto ECO de pensar Corrientes de acá a 20 años.
Una leve sonrisa apareció cuando se le recordó esa ya clásica frase suya que despotricó contra las redes sociales.
Durante toda la charla Ricardo no se movió del sillón, siquiera para reacomodarse. Tanto estaba atento a las preguntas y repreguntas que tampoco bebió un poco de agua.
Fueron 60 minutos de entrevista en los que sólo se relajó un poco cuando respondió un cuestionario más descontracturado propuesto por época para subirlo a sus redes.
En la despedida, no pudo resistirse a la invitación de degustar un par de chipacitos. Tanto que llevó un tercero para el camino. Y así se fue, acomodándose el barbijo y apretando la campera con su brazo derecho para que no se le cayera. “Chau, chau, gracias… nos vemos”, se despidió.

Fuente: Diario Época. Carlos Simón y Gustavo Gamboa




Domingo, 4 de julio de 2021

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